jueves, 14 de enero de 2010

Ponen la bata y la cama

Hago un copy-paste de un fragmento del libro Fundamentos de periodismo científico y divulgación mediática de Carlos Elías que ha publicado Jose María Mateos en su blog.
Perdona que te coja el texto, pero me ha parecido muy, muy interesante para su discusión:

Vía Las penas del Agente Smith

Esta estrategia de manipulación política a través de las fuentes científicas también sucedió en el caso de la cobertura del hundimiento del petrolero Prestige en 2002 (Elías, 2006b). En ambos casos, el patrón de comportamiento manipulador es el mismo (Elías, 2007):
  1. Creación de un comité de expertos con científicos de prestigio, pero con cercanía política e ideológica al gobierno de turno. Los científicos suelen tener prestigio académico, pero en la estrategia de manipulación es conveniente que no sean expertos en el asunto en cuestión. Por ejemplo, en el caso del Prestige, el presidente del comité de expertos no era un biólogo marino, sino un nanotecnólogo. 
  2. Centralización de toda la información en ese comité de expertos y elección de un único portavoz. 
  3. Elaboración de informes periódicos para alimentar a los periodistas y evitar que acudan a otras fuentes. Los informes deben ser más frecuentes cuanto mayor es la crisis. Cuando los medios ya no hablen del tema, debe evitarse enviar informes a los periodistas para no reabrir la crisis. Es decir, los informes científicos no se redactan en función de datos científicos, sino que prevalece la presión de los medios por obtener información. Cuando la catástrofe deja de ser noticia, se deja de enviar informes a los medios -sobre todo si son negativos- para evitar que resurja la crisis. 
  4. Desacreditar a las fuentes independientes que no estén de acuerdo con las tesis de los científicos gubernamentales. Así se crea controversia y en ella siempre gana en credibilidad aquella fuente que, además de peso científico, también tiene respaldo político. 
  5. Restringir el acceso a la obtención de datos sólo a aquellos científicos afines al gobierno. En el caso Doñana esto pudo hacerse, pues se acotó la zona afectada impidiendo que otros científicos -e incluso periodistas- pudieran tomar muestras del suelo afectado y realizar sus propios análisis químicos. Sin embargo, en el caso del Prestige fue imposible pues la zona afectada era inmensa. Por ello, en el caso Prestige sí se publicaron informes científicos -de laboratorios extranjeros- que contradijeron la versión oficial del gobierno español. 
  6. Debe acctuarse lo más rápidamente posible tras la crisis para evitar que los periodistas acudan a otras fuentes independientes.
Carlos Elías en Fundamentos de periodismo científico y divulgación mediática, sobre el modo de actuar de los gobiernos para utilizar la ciencia en beneficio político propio después de una catástrofe.

Vía Las penas del Agente Smith

Y es que da igual el color que tengan los políticos. Son políticos, y nos malipulan como quieren. La democracia no existe. Es una falacia. Es simplemente una oligarquía perpetuada por una evolución del sistema canovista donde los caciques son los medios de comunicación.
Me resulta irónico cuando una persona me dice que votar a los partidos pequeños es tirar el voto. No, tirar el voto es utilizarlo como el mal llamado voto "útil".
Cuando dejemos de hacer voto útil y realmente votemos lo que pensamos será cuando el pueblo, y no los políticos (meros representantes), gobierne. Dejad de justificar lo que hace PP o PSOE, PSOE o PP. Son iguales. Hacen lo mismo. Simplemente cambia el color. Llevamos muchos años de "democracia" como para no haber visto esto. Cosa que ocurre en todos los países.
Hay muchos partidos pequeños que pasan desapercibidos y que estoy seguro de que simpatizarán mucho más con vuestra forma de pensar que la demagogia y el cinismo propios de los que están en el poder.
Recuperad vuestro voto. Recuperad el poder que os otorga la verdadera democracia.

Un saludo

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